viernes, 15 de febrero de 2008

PODER ADQUISITIVO SE DESINFLA.


La reforma fiscal de 2005 fue apenas el inicio de una escalada de cargas tributarias y no tributarias que ha venido golpeando el bolsillo de los panameños en los últimos tres años. Producto de esa reforma y del crecimiento de la economía, el fisco recibió el año pasado mil 842 millones de dólares por concepto de ingresos tributarios, 597 millones ó 48% más que en 2004. Pero eso no incluye el aumento de las cotizaciones a la Caja de Seguro Social (CSS), los impuestos municipales, los recargos que se aplicarán a los gastos de representación ni las tasas e impuestos "indirectos" que se sumarán a la lista de egresos de las familias panameñas este año.


"Yo saqué mi cuenta y no me gustó nada", dice Ernesto, un empleado bancario que gana mil dólares de salario y mil dólares por gastos de representación. Antes pagaba al Seguro Social 90 dólares al mes, y a partir del 1 de julio le tocará pagar 120 dólares. "Esos son 30 dólares más al mes y 360 dólares más al año. Bueno, más para ellos y menos para mi familia", lamentó. Desde el 1 de enero de 2008, la cuota obrero patronal aumentó de 7.25% a 8% y, a partir del 1 de julio, aplicarán dicha cuota no solo al 25% del gasto de representación total que reciben algunos asalariados, sino al 50% de ese ingreso.


Y la situación de los profesionales y trabajadores independientes que ganan 9 mil 600 dólares al año es peor. A partir de este año, deben pagar a la CSS una cuota de 9.5% aplicada a la mitad de sus honorarios anuales. Si reciben, por ejemplo, 20 mil dólares al año, tendrán que aportar al seguro 998 dólares en 2008. En 2007 no pagaban nada. A esto podría sumarse la nueva tasa de 1% que desde el pasado 1 de noviembre se aplica a los servicios de telefonía e internet en el país, con la que el Gobierno pretende financiar el sistema de emergencia 911.


No solo las empresas asumirán el cargo, sino los particulares que tienen internet. Todos esos gastos adicionales implican otra reducción del poder adquisitivo, advierte el contador público Rubén Bustamante. Y también debilitan la capacidad que tienen las personas con ingresos medios de enfrentar la espiral inflacionaria que vive Panamá. Producto de la inflación, el poder adquisitivo de los salarios panameños se ha reducido en 40 dólares en los últimos dos años, estimó el economista Aristides Hernández, presidente de la firma Latin Consulting.


Con las nuevas cargas salariales y la escalada de precios, hoy los panameños se tienen que conformar con comprar menos bienes y servicios, o con optar por opciones de menor calidad como sustitutos. Desafortunadamente, todo parece indicar que esa realidad no cambiará pronto. Se estima que la inflación de 2008 será similar a la de 2007, de 4.2% anual, la mayor en 25 años. Y el Gobierno no tiene planes de hacer reformas tributarias que permitan ampliar el poder adquisitivo de la clase media, ajustando sus tasas o reconociendo la exoneración del impuesto sobre la renta a quienes ganan más de 800 dólares al mes.


Presidenciables venden otra reforma tributaria Más de un presidenciable ha incluido en su menú de campaña el plato de una nueva reforma tributaria para aliviar las cargas de la clase media y los pequeños y medianos empresarios de Panamá. Uno de ellos es Marco Ameglio, que prometió eliminar el cálculo alternativo del impuesto sobre la renta (CAIR) en sus primeros 90 días de mandato. La eliminación del CAIR también está en la agenda de Ricardo Martinelli y del banquero Alberto Vallarino, quienes, además, han anunciado que exonerarían del impuesto sobre la renta a todos los ciudadanos que ganen menos de mil dólares al mes.


En la actualidad, esa exoneración solo se aplica a los que reciben menos de 800 dólares mensuales. Juan Carlos Varela, por su parte, dice que reduciría los impuestos y aumentaría los salarios. También los líderes de los gremios empresariales han estado hablando del asunto. El presidente de la Cámara de Comercio, Domingo Latorraca, por ejemplo, recomendó al Gobierno revisar las tasas impositivas de todos los asalariados. La Prensa, 12 de febrero de 2007.

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